Maltrato con estoicismo

 ¿En verdad no necesito nada más?

"Ser joven es ser espontáneo, estar cerca de la fuente de la vida, erguirse y sacudirse las cadenas de una civilización caduca, osar lo que otros no han tenido el valor de emprender; en suma, volver a sumergirse en lo elemental".

Thomas Mann

Las cosas esenciales son invisibles ante los ojos 🤯 

Hola queridos lectores, sé que a lo largo de la existencia de este blog he sido una persona que ha escrito sobre diversos temas, muchos han impactado la forma en que veo el mundo de una manera diferente, hoy no es la excepción, hoy te vengo a encaminar con una antítesis de mi trabajo, hablaré sobre las dificultades y los resultados de maltratarte de forma estoica.

Estoy seguro que muchas veces no decidimos el entorno que nos va a rodear, desde luego que una vez adquirido el poder tenemos la oportunidad de construir nuestro propio hábitat, pero ¿qué es lo que provocan las primeras etapas en las que el entorno ya está constituido y tú tienes que enfrentarte a estas?

Al menos desde mi experiencia, estás provocan estar en constante contacto con la hostilidad, lo que el estoico dice: "Es lo que toca, si no puedes cambiarlo entonces atente a que tendrás que lidiar con esto", algunos entre los lectores pensarán: "¿Tengo que soportarlo?" ¡Desde luego que no! Podemos desertar en cualquier momento y dar pie a la siguiente experiencia, pero ¿qué sucede si esta decisión no es la mejor que puedes tomar? Es entonces donde te dices: "Bueno, es momento de aguantar".

Quizá muchas veces estas situaciones se presenten en tu vida más de una vez y de diferentes formas, desde la experiencia con una pareja o amistad tóxica hasta el momento en que tu empleo exige mucho más de lo que el mismo cuerpo es capaz de soportar. Y retomo la idea del autor de "El Principito", "Las cosas esenciales son invisibles ante los ojos".

¿Qué significa para ti aquello que te está haciendo sentir maltratado? Quizá sea una persona importante a la cual amas y aprecias con todo el corazón y crees que debes soportar lo que te dice o hace porque no está en tu control el cómo se comporte esta persona contigo. O será acaso que se trata de un empleo en el que te están maltratando todo el tiempo pero soportas no solo por el dinero, sino porque escapa de tu control el humor con el que tu jefe ha llegado al trabajo.

Platico todo esto porque a lo largo de esta etapa de mi vida que estoy viviendo, en la que me encuentro una vez más frente a frente con preguntas y adversidades, tengo que decirlo, soy un universitario que casi está graduado y que no sabe que le espera una vez la escuela termine, por primera vez en mi vida estaré libre de toda responsabilidad, ahora me toca a mí decidir como quiero sufrir, como quiero vivir, como quiero ganarme la vida, quizá esto en su momento suena muy asustador, ¡y sí que lo es! 

Pero, ¿no será acaso el momento más dulce y provechoso de toda tu existencia? Porque ahora el "maltrato con estoicismo" ¡tiene sentido! Algo magnífico y que se me acaba de ocurrir en este momento se basa en la idea de que quizá a lo largo de toda nuestra vida hemos estado atados a las decisiones de nuestros padres y de las cosas que ellos creyeron eran y son mejor para nosotros. Ahora, irónicamente, ¡nos hemos convertido en los adultos!

¿Por qué digo que el maltrato con estoicismo ahora tiene sentido? Fácil y sencillo, respóndete a ti mismo: "¿Qué significa ser adulto?" Dependiendo tu contexto podrás darle respuesta a esta pregunta. No existen respuestas malas ni buenas. Solo respuestas. 

Hablando de días recientes, nuevamente haciendo referencia a este precipicio en el que me encuentro, creo que no existe mejor respuesta para mí que "creer y tener fe". Llámame loco pero hace ya casi tres años cuando estaba escribiendo mi primer libro, sentado frente a mi pequeño buró con mi laptop, aún sin pruebas, sin testigos, sin tener la menor idea de lo que el futuro tendría preparado para mi, decidí creer en mi, decidí creer en cada uno de los sueños que tenía, decidí convertirme en una persona diferente e irónicamente, estoy una vez más sentado frente a mi laptop, temeroso del futuro.

Las cosas esenciales son invisibles ante los ojos, esas cosas esenciales forman parte de tu propio inventario de lo que significa ser adulto y de lo que significará en un futuro ese "maltrato con estoicismo", ¿asustado? ¡Dame cinco! Ya somos dos, solo déjame decirte que no somos lo suficientemente sabios para saber que pasará en un futuro.

Pero podemos ser lo suficientemente sabios para gozar de la espontaneidad de la vida, de levantarnos y reconfigurar nuestras propias creencias, vuelve a configurar tus valores, date cuenta que en la admiración en lo que otras personas han conseguido se encuentra el poder que necesitas, ¡cree! ¡Ten fe! Confía en ti mismo y en las decisiones que tu yo del presente está tomando, solo el tiempo y los acontecimientos determinarán que tan fuerte es tu espíritu para aferrarte a conseguir lo que quieres, poco a poco las preguntas irán apareciendo y con ello las respuestas se irán configurando.

Querido lector, espero este llamado a la batalla te intimide y aún así decidas enfrentarte a la misma, decidas dar todo de ti, decidas aprender, decidas creer y decidas aventurarte en lo que sea que decidas hacer, anímate a vivir la vida bajo tus propios términos. ❤️ 🙏🏽